Las familias numerosas por falta de planificación abundan en el Perú...
Un importante anuncio realizó el ministerio de la Mujer y Desarrollo Social, relacionado con la entrega gratuita a las mujeres de un anticonceptivo oral de emergencia.
Se trata de la denominada píldora del día siguiente que será proporcionada a las amas de casa que lo requieran sin importar su condición económica y social.
El objetivo de la trascendental medida es permitir el acceso a los métodos de prevención de los embarazos no deseados.
No se trata de un procedimiento abortivo. Simplemente es un factor farmacéutico que impide la concepción del óvulo femenino.
La distribución de la pastilla, sin costo alguno, otorga el derecho a las familias a tener sólo lo hijos que desean y sobre todo, que estén en condiciones de mantener.
Esta actitud gubernamental responde a la lamentable tendencia que los sectores menos favorecidos económicamente son los que tienen la mayor cantidad de descendientes.
Surge entonces en esos hogares el dramático problema de carecer de los recursos básicos e indispensables para su adecuada manutención.
Las estadísticas demuestran que su condición se agrava tanto que, muchos de los niños y jóvenes, no pueden ir a los centros de estudios, por falta de dinero de sus padres.
Esta situación genera, en algunos casos, que los pequeños queden desamparados y sean arrastrados por el camino de la delincuencia con sus fatales consecuencias.
Ocurre lo contrario en los grupos medianos y altos de la sociedad, económicamente más favorecidos, cuyo acceso a los anticonceptivos es mucho más fácil.
A diferencia de los casos anteriores, poseen todos los recursos indispensables para planificar su familia asegurando el futuro de sus hijos.
Consideramos que la medida adoptada por la cartera respectiva debe contar con el respaldo de las instituciones tutelares y la ciudadanía en su amplio contexto.
En oportuno recordar que en el Perú existen miles de familias que viven en condiciones infrahumanas, cuya existencia se torna caótica por la falta de planificación.
Sin embargo, es necesario que simultáneamente a las acciones de distribución del anticonceptivo, se informe y oriente a las amas de casa sobre la conveniencia de la medida.
Y que, por ningún motivo, se trate de desvirtuar la verdadera finalidad de esta loable tarea emprendida por el gobierno.
El tiempo y la formación de futuros hogares satisfechos con el número de hijos que realmente desearon tener y mantener, nos darán la razón…
Se trata de la denominada píldora del día siguiente que será proporcionada a las amas de casa que lo requieran sin importar su condición económica y social.
El objetivo de la trascendental medida es permitir el acceso a los métodos de prevención de los embarazos no deseados.
No se trata de un procedimiento abortivo. Simplemente es un factor farmacéutico que impide la concepción del óvulo femenino.
La distribución de la pastilla, sin costo alguno, otorga el derecho a las familias a tener sólo lo hijos que desean y sobre todo, que estén en condiciones de mantener.
Esta actitud gubernamental responde a la lamentable tendencia que los sectores menos favorecidos económicamente son los que tienen la mayor cantidad de descendientes.
Surge entonces en esos hogares el dramático problema de carecer de los recursos básicos e indispensables para su adecuada manutención.
Las estadísticas demuestran que su condición se agrava tanto que, muchos de los niños y jóvenes, no pueden ir a los centros de estudios, por falta de dinero de sus padres.
Esta situación genera, en algunos casos, que los pequeños queden desamparados y sean arrastrados por el camino de la delincuencia con sus fatales consecuencias.
Ocurre lo contrario en los grupos medianos y altos de la sociedad, económicamente más favorecidos, cuyo acceso a los anticonceptivos es mucho más fácil.
A diferencia de los casos anteriores, poseen todos los recursos indispensables para planificar su familia asegurando el futuro de sus hijos.
Consideramos que la medida adoptada por la cartera respectiva debe contar con el respaldo de las instituciones tutelares y la ciudadanía en su amplio contexto.
En oportuno recordar que en el Perú existen miles de familias que viven en condiciones infrahumanas, cuya existencia se torna caótica por la falta de planificación.
Sin embargo, es necesario que simultáneamente a las acciones de distribución del anticonceptivo, se informe y oriente a las amas de casa sobre la conveniencia de la medida.
Y que, por ningún motivo, se trate de desvirtuar la verdadera finalidad de esta loable tarea emprendida por el gobierno.
El tiempo y la formación de futuros hogares satisfechos con el número de hijos que realmente desearon tener y mantener, nos darán la razón…
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