sábado, 21 de marzo de 2009

EL MANGA: UNA PARTE DE LA VIDA EN JAPÓN…


Auténticas chicas de un manga japonés. Noten la dimensión de los ojos en relación con el rostro...

Dentro del mundo de particulalidades del pueblo japonés, el manga o anime ocupa un lugar preponderante. Digno de destacar.

Es casi inconcebible visitar un hogar o acudir a cualquier lugar público donde no se encuentren las ediciones más recientes.

El manga es la historieta ilustrada cuyo origen se remonta a épocas pasadas y que, actualmente, constituye una considerable industria capaz de generar más de ciento cincuenta millones de yenes anuales.

Hay para todos los gustos y edades. Los temas son variados y, en algunos casos, los trazos son destacados de manera exagerada.

Las historias juveniles o novelas rosa, tampoco escapan a la preferencia del público. En esos casos, aparecen unas jovencitas con cara de inocencia y facciones de ensueño.

Son personajes cuya característica principal es poseer ojos rendondos y muy grandes, tal vez para complacer aquella aspiración humana de no contentarse con lo que uno tiene.

La popularidad del manga es tal, que los protagonistas tienen réplicas en las más exigentes formas con la finalidad de ser coleccionados y poder tenerlos en casa en bulto.

Es increíble pensar que los dibujos en papel hayan logrado dar origen a una industria adicional que, igualmente, genera envidiables recursos.

Cada semana, millones de impacientes lectores esperan sus revistas favoritas entre las más de setenta series de animación que aparecen de manera regular.

Las publicaciones son voluminosas. Muy gruesas. Fácilmente superan las trescientas páginas llegando a bordear el medio millar.

El costo de cada una fluctúa entre los trescientos cincuenta y setecientos yenes.

Se considera que un joven japonés destina unos cien mil yenes, cien dólares, ochenta euros o más de trescientos soles mensuales en comprar sus animes.
Los estudiosos del fenómeno manga estiman que su popularidad obedece a que permite a la gente minimizar los problemas cotidianos, así como escapar brevemente del extremo control social y las rígidas normas que impone la vida diaria.

Mientras tanto, calculan que más de cientro treinta mil visitantes acudan al Tokio International Anime Fair, que se desarrolla en la futurista zona de Odaiba, que da frente al mar.

La gran muestra cuenta con la participación de doscientos cincuenticinco expositores distribuidos en setecientos cincuenta stands.

El éxito del evento, que se realiza en la capital japonesa, es una demostración de la masiva predilección que posee el manga.

Un producto impreso, que ha llegado al cine y la televisión, y que prácticamente forma parte indispensable en la existencia del ciudadano japonés…

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