martes, 24 de marzo de 2009

ESCRIBIR, ES UNA RESPONSABILIDAD…

Entusiastas participantes del curso de Corrección Idiomática, organizado por El Cultural, posan con el profesor Jorge Chávez. Fue una experiencia muy grata...

A escasos dos años de cumplir medio siglo de haber egresado de las aulas del centenario, tradicional y glorioso Colegio Nacional de San Juan de Trujillo, volví a sentirme un alumno secundario.

Ocurrió al asistir, a lado de un puñado de jóvenes de uno y otro sexo, al curso-taller Corrección Idiomática y Redacción para Narradores, que duró una semana.

Las lecciones fueron dictadas por el reconocido maestro de pedagogía universitaria Jorge Chávez Peralta en el sexto piso del, permanentemente concurrido, Centro Peruano Americano El Cultural, con Carlos Méndez en la coordinación

En realidad, fue un reencuentro con el colega con quien desarrollé efectiva labor docente en el siempre añorado Instituto Superior de Periodismo y Relaciones Públicas “Carlos Uceda Meza”, que funcionó, durante muchos años, en la quinta cuadra del jirón San Martín.

También la ocasión para refrescar las instructivas lecciones de gramática recibidas en las aulas del colegio y en la añeja e histórica Universidad Nacional de Trujillo.. Ahora, hábilmente explicadas por el profesor.

Los temas fueron valiosos para cualquiera que intente convivir con el uso del idioma español, aquel que fue creado “para hablar con los dioses”.

Versó sobre el manejo idiomático, una remembranza del fundamento de la puntuación, basada en el sentido, la distancia, el peso o equivalencia, tonema, tipo de pausa, línea de continuidad. Una parte de la inmensidad de normas que posee nuestro idioma.

Hablamos sobre la coma, el punto y coma, los dos puntos, el punto y seguido, las rayas, el tedioso queísmo y el exagerado empleo del gerundio y los verbos fáciles.

Al final concluimos en que el mejor maestro reside en los libros. Leer y leer es la clave. Leer de ocho a diez horas diarias, fue el consejo.

Al escuchar a Jorge expresarse de esa manera pensé, para mis a adentros, que me faltará tiempo de vida para cumplir con esa exigencia. De todos modos, trataré de leer más.

Me sentí protagonista cuando el profesor mencionó en algunas clases del Uceda Meza presentó, a manera de ejemplo, algunos artículos míos publicados cuando era redactor principal del diario “La Industria”, en las décadas del setenta y ochenta.

Destacó la forma de escribir utilizada como muestra del estilo cortado, casi poético. Y agregó: “Lo breve es bueno. Dos veces bueno”.

Resulta que fue el estilo que utilicé con frecuencia durante el desempeño de mi labor periodística y trato de mantener en este blog. Me apasionan los párrafos cortos y directos.

Finalmente, comprometió a todos los participantes a tener extremo cuidado al momento de escribir, pues hacerlo es una verdadera responsabilidad. Y es cierto.

En verdad, fueron instantes inolvidables repasar, una vez más, los fundamentos del español con ese grupo de compañeros que siempre mostró especial amabilidad y amistad sincera.

A Jorge Chávez Peralta, por sus sabias enseñanzas y a todos, por esos gratos momentos: ¡Muchas gracias…!

Tal vez, no volvamos a vernos. Pero, si desean compartir experiencias y algunas ocurrencias, visiten este espacio virtual. Será una original forma de sentirnos cerca…

1 comentario:

Artenoticias dijo...

En verdad el curso de redacción nos sirvió de mucho a todos los asistentes, sobre todo a mi, tengo un blog informativo y ahora (con todo lo que nos dijo el profesor) estoy siendo más cuidadosa con lo que hablo y escribo. En general, salí súper contenta del taller, hubiera deseado que dure una eternidad.