Dos de los stickers que el patronato Trujillo Ahora ha optado por distribuir entre los choferes de la ciudad en su intento de eliminar los ruidos molestos...
La primera manifestación efectiva contra la contaminación sonora en la ciudad acaba de ser emprendida por el patronato Trujillo Ahora y la municipalidad provincial.
Se efectúa mediante la distribución de adhesivos con frases alusivas a minimizar el uso de las bocinas, sirenas y cornetas en los automotores.
Son sencillos y pequeños mensajes impresos distribuidos por personal del Segat para ser colocados en las partes visibles de los vehículos.
Algunos dicen: “Más respeto, menos ruido igual tranquilidad” y “Gracias por recordarme NO tocar el claxon”.
Las expresiones están dirigidas a los conductores con la finalidad que hagan conciencia del daño que producen en la ciudadanía cuando operan dichos aparatos.
Es que se ha convertido en una mala costumbre que la mayoría de pilotos accionen dichos implementos para llamar la atención en forma innecesaria.
Según el Reglamento Nacional de Tránsito el claxon solo se puede usar para evitar situaciones peligrosas y por ninguna otra razón.
De acuerdo a las normas vigentes, en las zonas comerciales el ruido ambiental no debe superar los setenta decibeles durante el día. Aquí asciende a cien o mucho más.
Es oportuno recordar que hace más de medio año el Segat anunció la elaboración de un Mapa de Ruido de Trujillo sin que hasta la fecha se conozcan sus resultados.
En aquella ocasión manifestamos que el estudio resultaba innecesario, pues en nuestra urbe es muy fácil detectar a los infractores por el pésimo empleo de los aparatos sonoros.
Ahora empieza una etapa de concienciación previa para que en una nueva fase se detecte y sancione quienes persistan en producir ruidos que originan enfermedades en los seres humanos.
Para ello es indispensable que el municipio adquiera sonómetros que permiten medir el grado de intensidad de los ruidos.
Será una forma conveniente de ordenar el tránsito vehicular y devolver la tranquilidad a las personas que viven o caminan por el centro cívico y alrededores.
Al mismo tiempo, otorgará a Trujillo la calma y serenidad que caracteriza a toda ciudad moderna…
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