domingo, 23 de diciembre de 2012

¡FELIZ NAVIDAD…! ¡QUE SEA UNA FIESTA DIFERENTE...!

El nacimiento es una alegoría familiar que representa la llegada de Cristo al mundo para redimir a la humanidad...


Una vez más. Esta noche es Nochebuena y mañana Navidad. La celebración más sublime del mundo cristiano.

La fecha está dedicada a evocar el nacimiento de Jesús, quien vino a la Tierra para reivindicar al hombre y dejar sus sabias enseñanzas.

Sencillas lecciones que no exigen mayor esfuerzo para entenderlas y ponerlas en práctica en la vida diaria.

Alejarse de ellas o desobedecerlas, significa quebrantar el orden y perturbar la armonía que debe existir en la convivencia con los semejantes.

Y es ahí donde surgen casi todos los problemas que aquejan ahora a la humanidad



Tal vez esa sea la razón por la que el mes de diciembre de cada año nos trae el espíritu de la Navidad.

Para recordar que el 25 nació el hijo de Dios y reconocer que su mensaje de amor y paz perdura a través del tiempo.

No solo para saludarnos, abrazarnos hacernos regalos, desearnos felicidad y sedientos brindar hasta el siguiente día. No.

Llega la Navidad para elevar una plegaria por nosotros, quienes nos rodean, por el Perú y el mundo entero.

Porque pese a lo difícil que es vivir en un planeta convulsionado como el actual, nos invita a reflexionar y saber que podemos modificar nuestra conducta si estamos equivocados.

Los problemas perdurarán si nos dejamos envolver en ellos, sin pensar que siempre existe una solución.

Saber que con decisión, actitud y trabajo honesto se pueden lograr las metas que nos proponemos.

Meditar sobre la razón de ser de nuestra vida. Acerca de lo que somos. A dónde vamos. Lo que podemos hacer por nosotros y los demás.

Hagamos el intento esta noche. O, si es posible, todos los días. Notaremos que se puede.

¿Se imaginan si la mayoría nos uniéramos mentalmente en esa dirección e hiciéramos lo mismo…?

Todo quedaría atrás. El odio, el rencor, la ambición, la envidia, el delito, la violencia, la corrupción y los males que aquejan a la sociedad. El mundo será más humano.

Esta corriente de cambio debe incluir a quienes tienen la responsabilidad de ejercer justicia y conducir los destinos del país para que sus decisiones no generen el descontento popular.

Al final, que esta fiesta del nacimiento de Cristo ilumine su mente y enternezca sus corazones… ¡Feliz Navidad…!

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