La ciudadela de Chan Chan constituye motivo de admiración mundial...
Dentro del Ranking de Competividad
en Viajes y Turismo, elaborado por el reciente Foro Económico Mundial, el Perú se
encuentra en el sitial cincuentaiocho entre ciento cuarentaiún países
evaluados.
Sin embargo, si se compara lo que
ofrecemos y las condiciones favorables existentes, la situación es
diametralmente opuesta.
Sobre la cantidad de recursos
naturales y culturales que poseemos, nuestro país mantiene el expectante puesto
dieciséis a nivel del orbe.
Separando ambos rubros, en cuanto a
los naturales ocupamos el lugar doce, mientras en los culturales, el veintiséis
Respecto a la apertura internacional
nos ubicamos en la posición quince
debido a los acuerdos logrados con otras naciones por visados a los turistas.
En cambio, tomando en consideración
el indicador de seguridad, Perú obtuvo una bajísima puntuación en fiabilidad de
los servicios policiales logrando el casillero 135.
Tampoco nos favorece el punto
relativo a los denominados costos comerciales de la delincuencia donde se llega
al 125.
Otro de los aspectos que preocupa a
los visitantes es la infraestructura terrestre y portuaria por los que nos
colocan en el puesto 118.
El estudio considera que en el Perú
existe un serio déficit en la calidad de
la red de transporte terrestre, como la falta de autopistas, ocupando el 127.
Finalmente, en la densidad de vías y caminos pavimentados, que
garanticen la seguridad en los viajes, apenas nos situamos en el 118.
Los datos estadísticos consignados
refuerzan la idea que nuestro territorio posee una envidiable variedad de
recursos naturales.
Las regiones de costa, sierra y
selva, con su particular biodiversidad e
impresionantes paisajes con características propias y distintivas,
constituyen los principales exponentes.
Se complementan con la riqueza
cultural traducida en Machu Picchu, las líneas de Nazca, Chavín de Huantar,
Caral, Chan Chan, las huacas del Sol y de la Luna, el Señor de Sipán, entre
otros.
Lo absurdo es que la gran expectativa
turística que hay sobre el Perú se estrella en la inseguridad ciudadana
considerada como el más grave problema del país.
Es inadmisible que delegaciones
extranjeras que llegaron a recorrer y conocer nuestra tierra fueran víctimas
del robo de sus pertenencias.
Otros sufrieron accidentes en las
carreteras interprovinciales justo por las deficiencias que el mismo informe
reconoce.
Estos crudos datos del ranking que
analizamos deben motivar a la reflexión del gobierno, las autoridades y la
propia ciudadanía.
Basta indicar que hay naciones que
viven del turismo y otras donde gran parte de su presupuesto se sustenta en los
visitantes foráneos.
Superar estos problemas y mejorar
posiciones es factible. Todo depende de nosotros. La solución está en nuestras
manos…
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